Los 9 tipos de sacacorchos más utilizados

Al igual que conservar el vino en un estado óptimo, abrir una botella de vino es un arte en sí mismo y tener el sacacorchos adecuado es esencial para una experiencia de degustación satisfactoria.

Hay muchos tipos de sacacorchos disponibles en el mercado, cada uno con sus propias ventajas y desventajas, desde el clásico sacacorchos de palanca hasta el moderno sacacorchos eléctrico. Cada opción tiene su encanto y es importante conocer las diferencias para elegir el sacacorchos adecuado para ti.

En este post vamos a explorar los diferentes tipos de sacacorchos, sus características y sus aplicaciones para ayudarte a elegir el mejor según tus necesidades.

Tipos de sacacorchos

¿Eras consciente de la cantidad de sacacorchos que existen en la actualidad? Toma nota de todos ellos para realizar un servicio exclusivo en tu negocio:

Sacacorchos de 2 tiempos

Un sacacorchos de dos tiempos es un tipo de sacacorchos que utiliza dos movimientos separados para extraer el corcho de la botella. Es el más utilizado dentro del sector hostelero por ser pequeño, manejable y fácil de guardar.

En general, el primer movimiento se utiliza para perforar el corcho y el segundo movimiento se utiliza para retirar el corcho de la botella. Este tipo de sacacorchos se considera más eficiente y rápido de usar que otros tipos de sacacorchos, ya que permite una extracción más suave y controlada. Además, cuenta con una pequeña cuchilla para abrir el envoltorio de la parte superior de la botella y un gancho para abrir chapas de cerveza.

Sacacorchos con forma de T

Es una opción menos popular, pero en realidad más práctica que un sacacorchos de dos tiempos. Un sacacorchos con forma de T es un tipo de sacacorchos que se utiliza para extraer el corcho de la botella de vino a base de fuerza.

Funciona mediante un mecanismo de perforación y tirón, donde la parte inferior se inserta en el corcho, después se gira para atravesarlo y luego se utiliza la manija de madera para extraer el corcho de la botella. Requiere una mayor fuerza a la hora de ejercer el tirón, lo cual resulta menos práctico si la persona no cuenta con un agarre fuerte. Sin embargo, paradójicamente, la forma en T del sacacorchos le da una mayor superficie de agarre y una mayor estabilidad.

Habitualmente están más en desuso, ya que los de dos tiempos se hicieron más populares para abrir botellas de vino a una mayor velocidad, pero los más puritanos defienden este tipo de sacacorchos como el más práctico.

Sacacorchos de alas

Son los más utilizados dentro de los hogares, ya que no requieren ninguna complicación a la hora de manejarlos.

Tienen un mecanismo de dos alas que se abren y cierran para extraer el corcho de la botella. Su funcionamiento consiste en insertar la parte de rosca en el corcho, lo que hará que las "alas" del sacacorchos se vayan abriendo. Una vez la rosca haya cubierto el corcho completo, se presionan las alas hacia abajo para extraer el corcho de la botella.

Las alas proporcionan una mayor superficie de agarre y una mayor estabilidad, sobre todo para que al sacar el corcho este no se desvíe y se atasque. De esta manera, es ideal para los que no hayan trabajado jamás en hostelería, es más suave  y menos propenso a dañar el corcho o la botella de vino.

Sacacorchos de palanca

Pasando ya a los sacacorchos un poco más sofisticados, tenemos el tipo de palanca. Este sacacorchos  funciona insertando la punta del sacacorchos en el corcho y luego levantando la palanca para extraer el corcho de la botella.

La palanca proporciona la fuerza necesaria para extraer el corcho y también puede ayudar a mantener el equilibrio y el control durante el proceso de extracción, lo que resulta muy útil para aquellos que no cuentan con excesiva fuerza (al igual que los de alas). 

Suelen utilizarlo lo más clásicos y tradicionales, con lo que es posible que lo encuentres en restaurantes más sofisticados. Aunque algunos sacacorchos de palanca más modernos pueden tener características adicionales como una carcasa ergonómica o un mecanismo de liberación rápida, el principio básico sigue siendo el mismo.

Sacacorchos de rosca

Tienen ciertos elementos comunes con los sacacorchos de tipo T y los de alas, pero no tienen los brazos que impulsan hacia arriba el corcho y pueden guiar mejor el movimiento que los de forma en T.

Funciona enroscando el sacacorchos en el corcho de forma muy similar al de forma de T, pero permite situarlo en posición perfectamente vertical para que no dañemos la botella o el corcho en exceso. Así, podemos retirarlo de la botella de manera sencilla y sin romperlo. Algunos tipos de sacacorchos de rosca incluyen los de aire comprimido y los eléctricos, pero los más comunes son los manuales, que se activan mediante el giro de la manivela o palanca.

Sacacorchos en láminas

Este es uno de los tipos de sacacorchos más curiosos.

Abandonamos aquí por un momento la punta con forma de rosca para dar la bienvenida a un nuevo utensilio: las láminas. A pesar de lo que puedas pensar, no, no es nada complicado de utilizar. Al revés, lo único que hay que hacer es insertar las láminas a ambos lados del corcho, girar la herramienta utilizando el agarre superior y poco a poco ir tirando hasta que salga.

La apertura es suave y sacan los corchos prácticamente intactos. Además, a diferencia de los sacacorchos de rosca, no requieren mucha fuerza física y son más ligeros y portátiles.

Sacacorchos eléctrico

¿Pensabas que la tecnología no había llegado a la hostelería a la hora de abrir botellas de vino? Por supuesto que sí, y prueba de ello son los sacacorchos eléctricos: tan prácticos como interesantes.

Funcionan mediante la inserción de la parte superior del sacacorchos en el corcho y la activación del motor eléctrico. Este motor hace girar una rosca en el interior del sacacorchos, lo que permite retirar el corcho de la botella de manera rápida y sencilla. Los sacacorchos eléctricos son una opción cómoda y práctica para aquellos que abren botellas de vino con frecuencia, ya que no requieren esfuerzo físico y son más rápidos que los sacacorchos manuales. 

Sacacorchos de pared

Si eres de los que no les emociona mucho llevar el abridor a todas partes, los sacacorchos de pared te van a encantar.

Funciona mediante la inserción del corcho en una abertura en la parte superior del sacacorchos, donde se encuentra la rosca. La parte inferior del sacacorchos está montada en la pared, permitiendo al usuario girar una manivela o una palanca para hacer que la rosca extraiga el corcho de la botella.

Suelen ser más duraderos y estéticos que los sacacorchos manuales, lo que los hace una excelente opción para uso en hogares, restaurantes y bares.

Sacacorchos de aire comprimido

Y por último, os hablaremos de los sacacorchos de aire comprimido. En nuestra opinión, son los menos prácticos, ya que pueden alterar la composición del vino al inyectarse el aire, pero no dejan de ser un tipo de sacacorchos que debes conocer.

El sacacorchos de aire comprimido funciona mediante la inyección de aire a presión a través de una aguja fina entre el corcho y el vino para extraerlo con el mínimo esfuerzo. Se conecta a una fuente de aire comprimido, como una bomba o un compresor, y se coloca sobre el corcho de la botella. Al presionar un botón, se libera un chorro de aire comprimido que empuja el corcho hacia arriba y fuera de la botella, sin requerir el uso de esfuerzo manual. 

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